Análisis formal
Su forma es como la de un pantalón normal y corriente. Como dos rectángulos que nacen juntos y que conforme avanzan hacia abajo se van estrechando y separando simultáneamente.
Sus dimensiones son las siguientes:
altura: 1000mm (1m)
anchura:500mm en la cintura.
profundidad: 200mm en la cintura( varía en función de la persona que lo tenga puesto)
Está formado de una sola pieza. Su dibujo es el siguiente:
Análisis técnico
El objeto está compuesto por una sola pieza cosida.
Están fabricados con tela vaquera de algodón.
Los pantalones se han fabricado hilando algodón, algunos teñidos.
Deben estar normalizadas las dimensiones de altura y anchura, que van a depender de la talla y del fabricante. La profundidad no tiene porqué estar normalizada pues tendrá una u otra independientemente de la persona que lo utilice.
Su proceso de fabricación es el siguiente:
Tela
Los pantalones vaqueros están hechos de una tela que se llama denim. Tradicionalmente, el denim estaba compuesto por un 100% de algodón. Hoy en día, también se pueden conseguir algunas mezclas con poliéster y fibras elásticas. El denim también viene en diferentes "pesos" o densidades. No es naturalmente azul; se tiñe para lograr el clásico color azul que más exactamente debería ser llamado índigo. Este color se aplica sobre la tela antes de convertirla en un par de pantalones.
Molde
Luego de la tintura, el siguiente paso en la creación de un par de pantalones vaqueros es el corte de acuerdo a un molde. El molde es un trozo de material rígido que determina la forma y el corte de los mismos. El denim se coloca sobre el molde y luego se corta a lo largo de los bordes para darle a las piezas de tela las formas deseadas. Los moldes determinan si los pantalones serán de piernas acampanadas, ceñidas, de corte de bota o rectos. Una vez cortada, la tela está lista para ser cosida.
Costura
Muchos fabricantes de pantalones vaqueros usan un tipo de costura única como característica distintiva. A deferencia de la mayoría de las prendas, donde las costuras son invisibles, los pantalones vaqueros a menudo llevan costuras de colores contrastantes como características de diseño. La costura dorada, por ejemplo, es una elección popular. Una vez que la tela ha sido cortada, los pantalones se cosen usando este hilo. Luego se le agregan también ribetes, remaches y bolsillos.
Toques finales
La mayoría de los pantalones vaqueros, una vez fabricados, no están listos para la venta. La mayoría hoy en día vienen pre-lavados o lavados a la piedra. Los fabricantes hacen esto para hacer un pre-encogido de la prenda y que se adapte al talle preciso cuando se venda. El lavado a la piedra, en el que se agrega piedra pómez al proceso de lavado, ayuda a desteñir la tela y darle un aspecto gastado. Un tipo de denim, llamado denim crudo o denim seco, no es lavado antes de la venta. Este denim recuerda a las creaciones originales de Levi Strauss. Esta tela se destiñe y se ablanda luego del uso y los lavados reiterados.
Análisis funcional
La utilidad del objeto es la de cubrirnos las piernas y a los calzoncillos que a su vez cubren las partes íntimas.Además de para lo anteriormente mencionado, también sirve para evitar que tengamos frío en nuestra parte inferior del cuerpo.
Se coloca metiendo la pierna derecha en su correspondiente agujero y después la izquierda en el suyo, o al revés. Por supuesto, además de meter cada pierna en su lugar hay que estirarlas para que el pantalón cubra la pierna en su totalidad y también hemos de colocar el pantalón en la cintura. Por último, subimos la cremallera conocida comúnmente por “bragueta”, y abrochamos el cinturón.
Puede implicar el riesgo de que se le tenga alergia o alguna reacción a la tela, lo cuál no es común, pero siempre se debe tener en cuenta.
La principal norma de mantenimiento para que no se estropee es lavarlo cada vez que se ensucie o cada varios días para que se mantenga limpio.
Otros objetos que cumplan una función similar a la del pantalón largo vaquero serían otros de otros materiales o pantalones cortos.
Análisis socioeconómico
- Origen: la tela vaquera es de algodón, así que su origen es vegetal, de una planta que pertenece a la familia de las malváceas.
Los pantalones vaqueros se desarrollaron en Estados Unidos alrededor de 1872. Levi Strauss era por entonces un comerciante que vivía en San Francisco, pensó en utilizar las lonas que se utilizaban en la fabricación de tiendas de campaña para hacer ropas de trabajo a los mineros, ropas que resistieran la vida a la intemperie y el peso en los bolsillos del mineral encontrado, eran todos del color marrón usado para las tiendas y sin bolsillos traseros.
Uno de los clientes de Levi Strauss, un sastre que le compraba rollos de tela llamado Jacob Davis, cansado de comprar tela para remendar los pantalones rotos, pensó en reforzarlos con remaches de cobre en algunos puntos de especial tensión, tales como los extremos de los bolsillos o la base de la bragueta. Como Jacobs no tenía dinero para patentar la idea, le propuso a Levi hacer negocios juntos. Levi aceptó y el 20 de mayo de 1873 recibieron la patente #139,121 de la Oficina de patentes y marcas estadounidenses y nació el vaquero tal y como lo conocemos. Satisface la necesidad de poder cubrir nuestras piernas y evitar que pasemos frío.
A lo largo de la historia desde que se creó ha permitido, además de lo anteriormente mencionado, trabajar mucho más cómodamente.
Su fabricación repercute en el medio ambiene:
Se utilizan 7 mil litros de agua por cada kilo de fibra de algodón, cantidad requerida para la fabricación de un sólo pantalón.
Las plantaciones extensivas de algodón utilizan 25% de las sustancias químicas aplicadas en todo el mundo, que son plaguicidas como fosfatos orgánicos, sumamente tóxicos y pulverizadores de plaguicidas.
Durante la fabricación de la mezclilla a las fibras de algodón se les agrega almidón para incrementar su resistencia, los hilados son sumergidos en enromes tinas con tintura azul índigo (hecha a partir de recursos no renovables, como el petróleo); para suavizar las telas ya pintadas, se sumergen sosa cáustica, se lavan y enjuagan varias veces, con el consecuente gasto de agua; y para lograr el acabado sugerido por los diseñadores se friegan con polvo de sílice, químico altamente dañino para los pulmones de los obreros que los trabajan.
Algo muy sorprendente es que el 70% del total del gasto energético que se genera durante la fabricación y vida útil de unos pantalones de mezclilla se produce en los ciclos de lavado, secado y planchado que hacemos de éstos mientras los tenemos en nuestro poder.
Las fábricas realizan los pantalones que posteriormente venden a grandes centros comerciales y tiendad. Estos ponen dichos productos a disposición del consumidor a un precio mayor al de su compra para obtener beneficios. Así se comercializan básicamente.
El precio va a depender de la tienda material de composición, si está en rebajas... Pueden costar 15 euros, 20, 25, 30...
Se podrían haber fabricado con otros materiales como por ejemplo la pana o el lino.
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